La titular del Senado se mete de lleno en las negociaciones del proyecto de ley Bases. La idea sería acercar posiciones en la Cámara alta dando lugar a las modificaciones. Habría fechas para dictaminar y sesionar.
Mientras se desarrollaba la reunión informativa del plenario de comisiones de Legislación General, Presupuesto y Hacienda y Asuntos Constitucionales de la Cámara alta para debatir la ley de Bases, se llevaban a cabo intensas negociaciones en el Senado de la Nación para ir corrigiendo el texto que finalmente llegaría en dos semanas al recinto de sesiones.
En rigor, la fecha ya estaría elegida, y tal cual indicó hace días parlamentario.com, sería entre el 29 y el 30 de mayo. Las dudas persisten en torno a cuándo se logrará emitir dictamen. Había una presunción de que este mismo jueves pudiera llegarse a avanzar con el paquete fiscal que estaba previsto tratarse inmediatamente después del plenario.
Sin embargo, lo que originalmente se pensaba que podía terminar a las 14.30, se prolongó en el tiempo -tal cual sucediera con las anteriores reuniones- y finalmente, pasadas las 16, se acordó levantar la reunión de Presupuesto y Hacienda y dejar la continuidad de las reuniones para la próxima semana. Sería el martes, posiblemente a las 14. La idea es tratar de dictaminar al día siguiente.
Este jueves sobre el mediodía la vicepresidenta de la Nación, Victoria Villarruel, recibió la visita del ministro del Interior, Guillermo Francos, el vicejefe de Gabinete, José Rolandi, y la secretaria de Planeamiento Estratégico, María Ibarzabal Murphy, para repasar cuestiones que tienen que ver con las negociaciones que se desarrollan con las dos leyes que llegarán al recinto en los próximos días afinando el lápiz respecto de las propuestas de la oposición. Posteriormente puso manos a la obra y se reunió, por separado, con los senadores Martín Lousteau y Maximiliano Abad, ambos del radicalismo.
“Por momentos está todo arreglado y tenemos el numero para sesionar, y por momentos eso desaparece”, graficó un senador libertario consultado por parlamentario.com. Eso muestra la dinámica de estas intensas negociaciones que finalmente el oficialismo espera llegar a buen puerto.
Hasta el momento, la titular de la Cámara alta no había sido parte de las negociaciones para acercar posiciones en los bloques dialoguistas respecto al avance del texto del Gobierno Nacional. A partir de la inclusión de Villarruel, la idea sería llegar al recinto el 29.
Al cabo de esta nueva reunión plenaria se anunciará un cuarto intermedio hasta el martes a las 14 horas, con más invitados, mientras se sigue negociando en los despachos para firmar dictámenes el miércoles 23.
Luego de una semana cargada de reuniones plenarias, el informe de gestión de Nicolás Posse (jefe de Gabinete), más de una treintena de invitados y con la posibilidad real de que el Pacto de Mayo se postergue -la ley Bases ya no estará sancionada para el 25 como anhelaba el Poder Ejecutivo-, los funcionarios de Casa Rosada recurrieron a la vicepresidenta para desentramar las negociaciones en el Senado.
Si bien serían muy pocos los votos que le faltarían al oficialismo para hacerse con la ley Bases y el paquete fiscal, la intervención de Villarruel “mostraría cierto afán de voluntad y daría lugar a las modificaciones solicitadas”, más que nada las de los espacios dialoguistas.
Las alarmas sonaron en el oficialismo cuando esta semana quedó en evidencia que la senadora Guadalupe Tagliaferri (Pro) no era un voto afirmativo seguro a partir de la exposición de su invitado, José Tamboronea -empresario metalúrgico-, quien defenestró a la Cámara de Diputados por darle aval al RIGI.
A eso se le suma que el radical Martín Lousteau, la neuquina Lucila Crexell, la chubutense radical Edith Terenzi, los federales Edgardo Kueider y Carlos Espínola, la rionegrina Mónica Silva y los santacruceños José Carambia y Natalia Gadano, forman parte del rango de senadores que aún no definieron el sentido de sus votos. En estos nombres se enfocará el oficialismo para alcanzar los votos que permitan el avance de la ley Bases.