
Se trata de Yamil Santoro (RU), quien apuntó contra Diego Omar Suárez por “promover un régimen autoritario, exaltar la violencia institucional y difundir mensajes de odio”, actos que podrían implicar penas de prisión.
Después de que Nicolás Maduro volviera a tomar el poder en Venezuela, el diputado de Republicanos Unidos (RU) Yamil Santoro denunció penalmente a Diego Omar Suárez, conocido de manera pública como «Michelo», por promover el régimen dictatorial en ese país, lo que podría implicar penas de prisión.
La presentación judicial, formulada ante la Justicia Nacional, alega la comisión de los delitos de apología del crimen e intimidación pública, previstos en los artículos 213 y 212 del Código Penal, respectivamente. De ser hallado culpable, Suárez podría enfrentar penas de prisión.
Según sostiene Santoro en su denuncia, Suárez habría utilizado sus plataformas digitales, como TikTok e Instagram, para defender el régimen autoritario de Venezuela, promoviendo abiertamente actos de violencia institucional, desapariciones forzadas y persecución política. Además, la misma incluye la exaltación de líderes vinculados a graves violaciones a los derechos humanos y la justificación de un sistema político fraudulento.
También señala expresiones antisemitas vertidas por Suárez en sus redes sociales, calificándolas como un delito grave que fomenta el odio y la división en la sociedad argentina. Estas manifestaciones, si bien son tratadas como un delito adicional, refuerzan la gravedad de su accionar al alinearse con prácticas represivas y discriminatorias.
El escrito cuenta con fundamentos legales basados en pronunciamientos de organismos internacionales como la Comisión Interamericana de Derechos Humanos (CIDH) y en decisiones judiciales locales que condenaron acciones similares en el pasado. Además, subraya cómo estas conductas buscan erosionar los principios democráticos y los derechos humanos en el país.
Por lo que Santoro concluyó señalando que “es inadmisible que en una democracia alguien reivindique dictaduras violentas y represivas. Los discursos de odio y las apologías hacia regímenes autoritarios no tienen lugar en nuestra sociedad. Vamos a garantizar que estas conductas sean sancionadas y que los valores democráticos prevalezcan”.